El Gran Duelo
Uno nunca sabe cómo empezar a hablar de estas cosas.
Para quienes no estén al tanto, mi abuela Norma falleció el domingo, y mi primera mascota, Emma falleció el 2 de febrero de este mismo año.
La palabra duelo viene tanto de dolor como de guerra. Y ambos significados están íntimamente relacionados.
El duelo en términos de guerra suele asociarse a estar luchando contra un otro, pero muchas veces no somos conscientes de que luchamos con nosotros mismos.
Pongamos las cosas como son. Digamos las palabras correctas. No tengo miedo de decir que Emma murió de cáncer y que mi abu Norma murió de luchar la tanto una semana en el hospital.
Ambas muertes sorpresivas, es que uno nunca sabe y nunca está preparado cuando le dan la noticia de fallecimiento.
Uno nunca sabe cómo reaccionar. Yo trato de ser calmo al momento de la reacción, mas no escondo mis emociones, llorar me libera y me llena el alma al mismo tiempo.
Nehuén, mi psicólogo, me dice que le dé lugar a la emoción, y me explica cómi funcionan de manera biológica. No lloramos para siempre, la angustia es buena cuando la procesamos. Cada emoción tiene su momento de climax y luego desciende y deja nuestro corazón, que también tiene neuronas, por lo que también piensa, en paz. Nos da tranquilidad transitar la emoción.
Por eso quiero darles mi consejo a todxs lxs que estén transitando un duelo.
Expresen, no guarden, dios, la vida, lo que sea que creas por lo que estás en este mundo te creó o fuiste creadx con la capacidad de expresarte.
Cada vez que suspirás y sollozás en ese llanto estás liberando aliento de vida. La misma vida que tenía tu ser amado.
Sé que mis palabras pueden ser fuertes, pero quiero hablar de lo que nunca se habla, y me parece totalmente necesario.
Si hablo de astrología, lo mejor que les puedo aconsejar es que aprendan de las energías escorpianas, cancerianas y piscinas. De Plutón, la Luna y Neptuno.
Escorpio y Plutón nos dan una mirada de proceso profundo, entrando en los rincones más oscuros pero que a la vez más luz necesitan. Nos recuerdan que la vida es proceso de nacimiento, muerte y renacimiento hacia un nuevo ser más evolucionado en su consciencia.
Cáncer y la Luna nos presentan energías de refugio en aquellas personas más cercanas. Cáncer es la unión del clon que nos da la fuerza y la Luna nos ayuda a procesar nuestras emociones de una manera sana y si, también nos hace crecer como personas.
Piscis y Neptuno nos hablan de profundidades del ser, en una forma más colectiva y conectada con el inconsciente. Es un signo muy emocional y espiritual, por lo que ayuda mucho a procesar un duelo.
Por otro lado, si hablo de la energía de las leyes de la naturaleza, la geología y la arqueología nos muestran procesos de descomposición de huesos que pueden tardar muchos años, pero se convierten en minerales para la tierra.
Del polvo venimos y al polvo vamos. No es solo una frase bíblica, tiene un sentido profundo y literal. Dios es sabio al crear cada componente de la naturaleza, e incluso en ella podemos ver la eternidad.
Si hablo del alma y la física cuántica, el alma elige que camino seguir. Si reencarnará o no, si cumplió su proceso y se unirá a la armonía musical del universo, o también si desea quedarse en la tierra y acompañar de una manera más sobrenatural.
La física cuántica habla de universos paralelos, dónde habitamos continuamente en distintos planos al mismo tiempo.
Todas las opciones son válidas y el duelo nos hará renacer.
Que en paz descansen Emma y mi abu Norma. Son eternas.
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